Dicen que después de la tormenta llega la calma. Algo así ha pasado esta semana con el episodio de Juego de Tronos, titulado «Boold of my blood» (Sangre de mi sangre). No ha sido tan intenso, pero ha tenido sus momentazos, que seguro van a marcar los últimos 4 capítulos de esta temporada. ¡Sólo quedan cuatro! Qué rápido se pasa lo bueno….
A CONTINUACIÓN RESUMEN DEL 6X06 de JUEGO DE TRONOS, CONTIENE SPOILERS
Tras despedirnos, al menos de momento, del gigantón Hodor en el final del genial «The Door» la pasada semana, queríamos saber qué había sido de Meera y Bran, y eso es precisamente lo que nos han ofrecido para comenzar el episodio. Es sin duda una de las cosas que más me está gustando esta temporada en Juego de Tronos, cómo están tratando la continuidad. Meera arrastra al joven Stark en esa carretilla improvisada, en una huída agónica, mientras vemos cómo poco a poco se les acercan los caminantes blancos. Bran, todavía en trance, tiene varias visiones de sucesos que ya habíamos visto, del pasado, y por qué no, del futuro de esta grandísima historia.
Entre ellas, destacaría algo que todavía no habíamos visto en la serie, al rey loco, mandándolos quemar a todos con fuego valyrio. Una escena muy chula que nos da más pistas sobre la importancia que desde ya tienen los poderes de nuevo cuervo de tres ojos. También vemos a un joven Ned Stark preguntar por su hermana, y sobre todos ellos, a los caminantes blancos acechandoles. Precisamente, es lo que le hace salir del trance. Cuando ya todo parecía perdido, un caballero a lomos de un corcel negro les salva de una muerte más que segura. Y lo hace demostrando unas habilidades poco comunes (lo de la bola de pinchos ardiendo ha molado mucho).
Aparcamos de momento la acción al norte del muro para concluir la travesía de Sam y Gilly, que por fin han llegado a Colina Cuervo, Justo antes de llegar, él nos recuerda que fue prácticamente expulsado de su propio hogar por su padre, y obligado a unirse a la Guardia de la Noche por lo que no espera un recibimiento demasiado bueno. Sin embargo, al llegar a su casa, son su madre y hermana las que les están esperando. El cariño se nota a la legua, e incluso intuímos ya que todo está igual que cuando se fue. Ni su padre ni su hermano están en ese momento, y su pobre hermana, nada más verle le suelta que tiene que casarse con «nosequé Señor». Por eso, y a pesar de la cara de alucine de Gilly al ver tanto lujo y opulencia, la reunión familiar a la hora de la cena no va nada bien.
Poco le duran las ganas de hablar al bueno de Sam, ya que su padre le corta una y otra vez con insultos y desprecios, teniendo que ser la salvaje la que le corte y dé la cara por él. Precisamente su condición de salvaje será la gota que colme el vaso para el padre, que aunque consiente que ella y el bebé se puedan quedar en sus terrenos, obliga a Sam a marcharse al alba. Ese momento de la despedida es enternecedor, se nota a la legua el amor que se profesan ambos, y aunque en un primer momento parece que sus caminos se separan, Sam vuelve para decirle que deben estar juntos, los tres, y abandonan su hogar. Antes de hacerlo, se lleva una espada de acero valyrio (de las pocas que quedan según su padre), uno de los tesoros de la familia.
En Desembarco del Rey, el tiempo parece detenerse cada vez que abre la boca el Gorrión Supremo. Por las promos y avances de este episodio que había visto, pensaba que podía haberle llegado la hora, pero nada más lejos de la realidad, sale reforzado de este episodio.¿Por qué? Por el maldito «niño rey» Tommen. No es la primera vez, ni será la última, que le vemos dialogar y escuchar los consejos del viejo, que poco a poco va mostrando sus cartas, que no eran otras que meterse en la cabeza del joven monarca. En esta ocasión, lo consigue dándole lo que más ansía, encontrarse con su reina, Margaery Tyrell. El momento del encuentro es casi anecdótico, aunque a su vez nos deja claro que Tommen es la persona más influenciable de todo Poniente. Tan sólo tiene que decirle que «ese hombre tiene algo especial» y la hemos liado gorda….
¿Recordáis la jugada elaborada entre Cersei, Jaime y la casa Tyrel para recuperar a Margaery y Loras y acabar con los militantes de la fe? Pues se deciden a ponerla en marcha. Cuando el Gorrión Supremo (el actor que lo interpreta encima es clavado al Papa Francisco), está dando el discurso previo al Camino de la Expiación de la reina, aparece el ejército Tyrel, acompañados de Jaime Lannister, Lord Comandante de la Guardia Real. Exigen que sean devueltos los herederos de la casa de las flores, pero el líder de la fe, tiene una sorpresa guardada. No habrá camino de la expiación porque Fe y Corona están juntos, o lo que es lo mismo, Tommen es un moñas que ha caído en la labia del Gorrión. Chapeau. Una batalla ganada sin pelear. (Mola el detalle de la nueva guardia del rey, con un emblema uniendo corona y fe).
Y no contento con eso, relega a su tío/padre de su puesto al frente de la Guardia Real para que marche al norte a recuperar Aguasdulces. Lógicamente, el cabreo de Jaime es monumental, aunque siempre tiene el consuelo de Cersei, quien además habla de la proximidad de su juicio. Ni siquiera se muestra preocupada, será un juicio por combate y ella cuenta con La Montaña. Yo también estaría tranquilo.
En Braavos (por fin un poco de avance en la historia de Arya) vemos a la pequeña Stark contemplando de nuevo el teatro de la pasada semana, aunque en esta ocasión nos muestran la parte de la muerte Joffrey y de Tywin Lannister. Es una licencia que los propios creadores de la serie se están permitiendo, poder recordar de esta manera los hechos más importantes de la historia que nos están contando.
Como recordarás, el hombre sin rostro le encargó acabar con la vida de la actriz protagonista de esta obra, y a ello se dispone. Antes, durante la representación, vemos a Arya feliz y contenta al ver caer al joven rey, aunque sea de manera ficticia, aunque luego parece mostrar cierta empatía con los sentimientos de una madre al perder a su hijo. Llega a ponerle veneno en su bebida, y a entablar una pequeña conversación con ella, en la que incluso le anima a que haga algún cambio en el texto que interpreta. Cuando ve que sus propuestas son deshechadas, Arya se compadece de ella y evita que se tome el veneno.
La chica sin nombre está sentenciada. Jaqen se entera y ordena su muerte. Pero la valiente Stark contará con un arma inesperada, recupera Aguja, la espada que le entregó Jon y con la que practicaba con Syrio Forel. Un momentazo, proque para mí sólo puede significar una cosa, que quiere romper con su vida en Braavos y volver a casa. Ya veremos en qué queda eso.
Vamos con la recta final. Tres frentes son los que nos llaman la atención. El primero en Los Gemelos, donde recuperamos a Wlader Frey (no lo veíamos desde la Boda Roja no?) quien está abroncando a dos soldados por perder Aguasdulces. Les insiste en que tienen que ir a recuperarlo de manos del Pez Negro, y les muestra un as bajo la manga que teníamos olvidado: tiene prisionero a Edmure Tully. Se está gestando una batalla espectacular en el norte, y no nos la vamos a perder.
Volviendo al principio, al norte del muro, a Bran, Meera y su salvador misterioso. Ya sabíamos quién era por los ríos de información y tinta que se había vertido sobre su identidad. Pero el momento, que recogemos más abajo en nuestra imagen de la semana, confirma una de las esperanzas de muchos fans de Juego de Tronos. Vuelve el Tío Benjen. Da una explicación de cómo ha sobrevivido, cuando todos le daban por muerto. Le salvaron los niños del bosque e invirtieron su transformación a caminante blanco clavándole un crista de Vidriagón en el pecho. Benjen le dice a Bran que es el nuevo cuervo de tres ojos y aunque sabe que todavía no está preparado, está convencido de que cuando llegue el momento de la verdad, lo estará.
Y llegamos a la escena final. Nos situamos en territorio Dothraki, con Dany encabezando la expedición junto con Daarios. La marcha se detiene porque ve algo en la lejanía. Dice que va a ir sola, y al poco escuhamos un temible rugido, una sombra alada gigantesca que sobrevuela el ejército de dothrakis y que finalmente se posa en tierra. Es Drogon, con la madre de dragones a sus lomos.
Da un discurso sobre todo lo que planea hacer cuando cruce el mar angosto. Y se acaba ganando a sus miles de guerreros con una sencilla frase «los Khal eligen a 5 jinetes para que sean la sangre de su sangre, yo os elijo a todos vosotros para que peleéis por mi y recuperemos mi trono». Espectacular, intenso, genial. Por fin parece que los dragones están cerca de entrar en acción.
Hasta aquí la review del episodio, esperamos tus comentarios más abajo sobre el capítulo y el futuro de esta temporada.
BOLA EXTRA: Os dejamos con el trailer del que será séptimo episodio, en una semana, de Juego de Tronos.
La Frase
Tommen Baratheon: La Corona y la Fe son los pilares gemelos sobre los que se asienta el mundo. Juntos, devolveremos a los siete reinos a su gloria.
La Imagen
Era una de las teorías más extendidas y tenía que llegar el momento. Por fin el tío Benjen Stark ha vuelto, con muchas más preguntas que respuestas, pero para salvar a su sobrino de una muerte segura.
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